¿Por qué será que un año se pasa tan rápido? Risas, llantos, amor, odio, justicia, olvido.
Miles de factores que intervinieron para terminar derramando un período mas de nuestra vida, pero
¿hasta dónde es bueno o malo el tiempo?
El tiempo olvida, se olvida de nosotros y de nuestro sufrimiento. El tiempo recuerda, pasan
siglos y sigue recordando. El tiempo me hace llorar, logra que las lagrimas expresen lo que viví junto a mil sueños, sueños que no dejaron de existir pese al paso del tiempo.
Y si no se olvida,¿el tiempo es infinito?
Ya no nos queda mucho de este elemento, hay que saber disfrutarlo,
no perderlo. Valorarlo como a nada, ya que cada segundo es único.
Cada sensación, cada sabor, cada olor, cada mirada es única.
Cada bocanada de aire, cada lágrima de sal.
El tiempo no es oro, el tiempo es la vida, porque sin tiempo no hay nada. Y no esperemos un tiempo, porque se puede acabar mañana.
El tiempo es hoy, hagámoslo valer.